Comer fruta ayuda a hidratarnos correctamente

El calor hace que nuestra piel deje pasar más agua hacia fuera para regular la temperatura corporal, por eso perdemos tanta agua. Pero no sólo de beber vive el hombre, junto con el agua también se pierden electrolitos, por eso la fruta es la mejor forma de hidratarse en verano.
La mayor parte de frutas, sobre todo las de verano, tienen de un 90 a un 98% de agua, algo perfecto para completar la hidratación diaria. Pero no sólo eso, junto a ese agua estaremos ingiriendo vitaminas y minerales, un complemento perfecto para hidratarnos mejor y de forma más completa.
Hay muchas formas de ingerir la fruta en verano, comiéndola tal cual, cruda, a modo de zumos o batidos, como brochetas de fruta, macedonia o cocinándola en algunos platos. Cada vez que comamos una fruta es como si bebiésemos un par de sorbos de agua, pero con mucha más sustancia.
A todas ellas les podemos añadir una más que es doblemente hidratante, el agua con frutas. Esta manera de consumir la fruta hace que combinemos los beneficios de la ingesta de agua en verano y la del consumo de frutas.
Si te decantas por consumir la fruta junto con el agua, eres libre de combinar diferentes tipos de para que el resultado sea espectacular. La preparación es muy sencilla, únicamente deberás juntar trozos de frutas, da igual que sea de una sola variedad de fruta o de varias, en un recipiente con agua. A la mezcla puedes añadirle si deseas alguna hierba aromática como la hierbabuena o la menta. Es aconsejable que dejes el liquído en la nevera para que se enfríe. La variedad de frutas hace que las composiciones sean infinitas, suelta tu imaginación y consigue las mezclas más refrescantes.
Con la llegada de los días calurosos la ingesta de líquido debe aumentarse sobre medio litro al día, hay gente a la que le es imposible o no es capaz de beber tanto líquido, pero si complementamos esa hidratación con fruta será mucho más fácil. Además, la fruta contiene fructosa que nos dará un pico de energía importante para evitar estos bajones a ciertas horas de calor.