Cinco actividades deportivas perfectas para hacer en familia

Cada día se ven más familias en los parques haciendo actividades deportivas. Es la mejor forma de fomentar una vida sana y de evitar el sedentarismo prematuro. Aunque la zona donde vayamos y el material del que dispongamos puede condicionar qué tipo de deporte hacer, hoy os vamos a hablar de cinco actividades deportivas perfectas para practicar en familia. El deporte en familia tiene muchos beneficios.
BAILAR: MOVERSE AL RITMO DE LA MÚSICA ES INNATO EN LOS NIÑOS
Si en un lugar donde hay niños (sobre todo niños pequeños), pones música, seguramente la mayor parte de ellos comenzarán a moverse al ritmo de la música. Bailar es algo innato en los niños, sobre todo a edades menores de 10 años, donde la vergüenza no ha aparecido y no tienen problema en dar rienda suelta a los movimientos de su cuerpo.
Bailes organizados tipo “la conga” o “corro de la patata” también gustan mucho a los niños, son bailes sencillos de aprender y que no requieren de mucha coordinación. Bailar también puede considerarse una actividad física saludable, no dejes de hacerlo con tus hijos.
PATINAR: DIFÍCIL AL INICIO, DIVERTIDO DESDE EL PRIMER MINUTO
A los niños eso de moverse sobre ruedas les encanta. Los mayores debemos de tener más cuidado, ya que nuestra agilidad no es la misma que la de ellos, pero no se tarda mucho tiempo en aprender a patinar de forma básica.
Os recomiendo una zona sin pendiente y lisa, donde los niños puedan deslizarse sin problema de alcanzar mucha velocidad. Por supuesto, las protecciones como casco, rodilleras y coderas van a ser un elemento de seguridad imprescindible para evitar males mayores en caídas.
NADAR: Y NO SOLO EN VERANO
A todos los niños les gusta el medio acuático cuando son capaces de mantenerse a flote mínimamente. Aunque no sea verano, podemos coger la costumbre de ir una o dos veces por semana a la piscina para practicar el nado. Esto es un seguro de vida para padres, ya que cuando llega el verano nos aseguramos de que los niños saben nadar bien.Y no nos referimos a ir a la piscina a hacer largos, también hay mucha oferta de actividades lúdicas en piscina con otros padres y niños. Y si nuestro hijo todavía no sabe nadar, mejor que mejor para iniciarlo en la natación cuando vayamos nosotros. El agua los niños la asocian a diversión, pueden estar horas moviéndose dentro de ella, aprovechemos este medio para que hagan deporte y lo pasen bien.
PELOTAS Y GLOBOS, UN CLÁSICO PARA LOS MÁS PEQUEÑOS
La pelota no falta en cualquier mochila de deporte cuando se va al parque. A los niños les gusta mucho correr detrás de un balón. Si los niños todavía son muy pequeños, yo os recomiendo que sustituyáis el balón por un globo, ya que al tener más fase de vuelo, los niños tienen más continuidad en el juego.
Y cuando hablamos de pelota no solo nos referimos a fútbol, también a baloncesto, tenis o cualquier deporte que requiera de un esférico.
SENDERISMO Y BICICLETA: PARA DISFRUTAR DEL AIRE LIBRE
Cuando los niños son más mayores apetece salir con ellos al campo. Tanto el senderismo como una ruta en bici de montaña son actividades perfectas para disfrutar de un día de deporte en plena naturaleza.
Como vimos hace poco, las Vías Verdes son una estupenda opción para este tipo de actividades. Cuando viajamos fuera, las rutas de senderismo son otra forma de conocer la zona.
Lo importante es que el deporte esté presente en la familia de forma frecuente, para que los niños crezcan sabiendo que es una parte fundamental del día a día. Solo es cuestión de ir viendo qué actividades les gustan más y con las que se sienten motivados para salir a jugar un rato.