Gratitud ¿cómo practicarla?

“Es de bien nacido, ser agradecido”. Este dicho popular, tan acertado como ancestral, aboga por saber agradecer los hechos, las experiencias, y en definitiva, cualquier acto vivido como seres humanos que somos ya que la gratitud es muy importante.
Gratitud ¿Qué es?
La gratitud responde a la capacidad de ser agradecido, es una fortaleza humana que también ha sido catalogada a su vez bajo dos condiciones:
- Una respuesta emocional que sentimos al percibir algo beneficioso para nosotros.
- Que ésta sea aplicada de forma altruista, genuina y desinteresada pero intencionada y voluntaria.
Ser agradecido/a representa un sentimiento de apreciación por los favores recibidos de otros, que se está empezando a popularizar bajo el concepto anglosajón de “thankful appreciation”. En definitiva, cuando agradecemos, nos dirigimos a apreciar la ayuda prestada de los demás y esta acción tiene que ver con lo que se conoce como la práctica de la gratitud.
Gratitud ¿Cómo vivirla?
No todas las personas tenemos la misma capacidad para experimentar y expresar la gratitud ni tampoco la misma predisposición para practicarla, apreciarla y valorarla como tal.
La capacidad de gratitud de cada uno puede ser evaluada mediante instrumentos específicos como son los cuestionarios que se aplican para la medición de los diferentes procesos que conducen dicha capacidad.
Entre todos los factores que influyen y determinan la experiencia de la gratitud, podemos encontrar:
- Factores psicológicos: por ejemplo, la actitud ante la vida que cada uno de nosotros tenemos para intentar sentirnos felices, en mayor o menor medida, con nosotros mismos y con todo aquello que nos rodea.
- Factores individuales: como el género, ya que las mujeres tienden a expresar mejor la gratitud respecto a los hombres, entre otros motivos porque ellos suelen vivir la práctica de la gratitud como un sinónimo de parecer más vulnerables o incluso de sentirse más débiles.
- Factores personales: como ciertos rasgos de la personalidad, pues las personas que son más extrovertidas y amables en sus relaciones sociales suelen ser también más agradecidas o poseer al menos una mayor predisposición a serlo.
Los beneficios de practicar la gratitud
Es fundamental saber reconocer la importancia de practicar la gratitud ya que ésta se ha relacionado con una mayor felicidad y bienestar, siendo numerosos estudios los que han demostrado que las personas agradecidas:
- Son más felices, gozan de una vida más plena y satisfactoria.
- Tienden a una mayor facilidad para encontrar aspectos positivos en experiencias y situaciones vitales que generan sufrimiento en nuestras vidas.
- Potencian a su vez los recursos personales como, por ejemplo la capacidad de resiliencia (la que tenemos las personas para superar y adaptarnos a circunstancias o situaciones traumáticas o adversas).
- Afrontan mejor los momentos de superación y adversidad.
- Favorecen a crear un refuerzo positivo en los actos de buena voluntad, para que puedan repetirse en el tiempo.
Sin duda alguna, practicar la gratitud va a suponer una ventaja en nuestras vidas. Por tanto, te invitamos a que valores todas aquellas cosas por las cuales debes estar agradecido, y simplemente agradezcas: agradece existir, agradece si trabajas, agradece si gozas de buena salud, agradece si tienes una familia, pareja, amigos… agradece que te tienes a ti mismo. Seguro que tienes motivos, así que AGRADECE, y A DIARIO.
Debemos controlar nuestra salud emocional para tener una vida plena. Por ello, nuestro blog cuenta con una sección dedicada al bienestar emocional cuyos últimos contenidos son los siguientes: