Ejercicios para personas mayores

Ser personas activas desde la infancia conlleva que en la etapa adulta el cuerpo responda ante los cambios fisiológicos de una manera más adecuada y menos limitante. Los ejercicios para personas mayores les ayudarán a mantenerse con energía.
Ejercicios para personas mayores ¿cuál es el mejor?
Tener entre estos hábitos la práctica de actividad física es un factor muy positivo y se recomienda no abandonarlo, pero si ese hábito no ha formado parte del día a día, nunca es tarde para incorporarlo, también en la etapa adulta.
Respecto al tipo de actividades más recomendadas la principal premisa es que sea atractiva para quien la vaya a practicar. Cualquier cambio en la rutina significa un esfuerzo y, por tanto, hay que ponerlo fácil, atractivo, cercano al domicilio y si gusta hacerlo en grupo buscar compañeros/as para hacer ejercicio. Entre las actividades que se suelen recomendar en esta época por ser completas y de las que se obtienen beneficios a los niveles previamente mencionados se encuentran el baile, el taichí, actividades acuáticas, gimnasia, bicicleta y andar.
Ejercicios para personas mayores: ¿Qué beneficios tiene?
Hacer ejercicio es una fuente de beneficios no sólo a nivel físico sino también mental. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda realizar 150 minutos semanales como mínimo de actividades físicas moderadas aeróbica, sin olvidar ejercitar la musculatura para mejorar la fuerza, que es una capacidad que hay que conservar y que con la edad mengua. Estos 150 minutos pueden realizarse en sesiones en días diferentes, pero de un mínimo de 10 minutos por sesión y de manera progresiva ir aumentando el tiempo de dedicación siempre en función de las posibilidades de cada individuo. Andar 30 minutos al día es una buena opción de inicio.
El objetivo de este tipo de ejercicio es múltiple:
- Mejora a nivel cardiovascular.
- Control de los niveles de colesterol y glucosa.
- Evitar el sobrepeso o ayudar a reducirlo.
- Mejora el descanso.
- Mantiene/mejora la movilidad y la funcionalidad articular.
- Aumenta la autoestima.
- Es un factor socializador.
En cuanto a la vertiente mental, son muchos los estudios y grupos de investigación que desde hace años, y también en la actualidad, sitúan al ejercicio como una herramienta para prevenir problemas de salud en personas mayores de 65 años. Pero, sobre todo, se centran en los beneficios a nivel mental. Con el ejercicio se llega a retrasar el envejecimiento cerebral y a su vez prevenir enfermedades neurodegenerativas como la demencia y el alzhéimer. En la actualidad no se puede impedir su evolución, pero sí se puede mejorar la calidad de vida de aquellos que las sufren, en concreto las guías médicas específicas recomiendan dos días de ejercicio a la semana para estas personas.
Dra. Eva Ferrer - Especialista en Medicina del Deporte - Médico colaborador de Avance Medical