Etapa I de alimentación del bebé: "I love milk"

La leche materna es el mejor alimento durante sus primeros meses. Le proporciona nutrientes, se adapta a su función digestiva y a sus necesidades y le protege de infecciones. Además, si miras el lado práctico, siempre está preparada y a la temperatura ideal.
Pero si no le das el pecho, hay muy buenas leches adaptadas para preparar en biberón. Solo tienes que recordar cuatro cosas:
- En primer lugar, esterilízalo bien, hirviéndolo de 5 a 10 minutos o en un esterilizador.
- Luego piensa si vas a utilizar agua del grifo o embotellada. La del grifo deberás hervirla unos 5 minutos y dejarla enfriar hasta la temperatura correcta.
- Añade la cantidad de leche que indica el envase: por cada 30 ml de agua una medida dosificadora, siempre rasa y sin comprimir.
- Por último, tapa el biberón y agítalo bien para que no queden grumos.
Sobre todo, comprueba la temperatura. Si está muy caliente se puede quemar. Si suele devolver la leche, díselo a tu pediatra porque las hay especiales para evitarlo. Al terminar, limpia en seguida el biberón. Y no guardes las sobras para otra toma.
Si le vas a dar de comer fuera de casa, no hagas nunca el biberón con antelación: llévate el agua necesaria y un envase dosificador con la leche y prepáralo en el momento de tomarlo. Y no te olvides nada...