Pico de polución en las ciudades

¿Qué efectos tiene la polución y los componentes contaminantes en nuestra salud? La composición química natural del aire atmosférico ha permanecido constante con mínimas oscilaciones desde tiempos inmemoriales, permitiendo inicialmente la aparición de la vida y posteriormente la biodiversidad y la evolución de todas las especies.
Componentes de la polución
Los componentes naturales de la atmósfera se clasifican en:
- Mayoritarios (en elevada concentración): los gases de N2 (nitrógeno), O2 (oxígeno) y CO2 (dióxido de carbono)…
- Minoritarios (baja concentración): el vapor de agua, el O3 (ozono), los óxidos de azufre y nitrógeno y partículas en suspensión (bacterias, granos de polen, aerosol terrígeno...), etc.
Los contaminantes atmosféricos físicos, químicos y biológicos se clasifican en dos grupos:
- Biogénicos o naturales: provenientes de emanaciones gaseosas del subsuelo o erupciones volcánicas, partículas de la erosión de las rocas, tormentas eléctricas, procesos de descomposición de la materia orgánica, incendios de los bosques por causas naturales, etc....).
- Antropogénicos o artificiales: centrales térmicas y nucleares, procesos industriales, calefacción, incineración de residuos, emisión de gases por combustión de gasolina/diésel de los vehículos, etc.
Los primeros suelen ser normalmente neutralizados por la capacidad autoregeneradora de la Naturaleza. Los antropogénicos, especialmente los “Industriales”, generan importantes problemas medioambientales, por estar saturando y sobrepasando esta actividad autodepurativa. Especialmente a partir de la segunda mitad del siglo XX se empezaron a generar grandes cantidades de contaminantes químicos atmosféricos, potenciado por los sistemas sociales capitalistas/consumistas imperantes en los países occidentales.
Clasificación de los contaminantes según composición
- Compuestos de C (Carbono): CO (monóxido de carbono) y CO2 (dióxido de carbono).
- Compuestos de S (Azufre): SO2 (dióxido de azufre), SO3 y SH2 (sulfuro de hidrógeno).
- Compuestos de N (Nitrógeno): N2O (óxido nitroso), NO, NH3.
- Partículas y aerosoles.
- Metales pesados: Mercurio, plomo…
- Hidrocarburos: CH4(metano).
- Oxidantes fotoquímicos: O3 troposférico y estratosférico.
- Sustancias radiactivas: Rn 222, I131, Cs 13….
CURIOSIDAD…
Es probable que la exposición continuada y mantenida a determinados contaminantes durante toda la vida, aunque sea en proporciones bajas, sea más nociva para nuestro cuerpo que las exposiciones puntuales intensas.
Riesgos de la polución para la salud
- Efectos de neurotoxicidad (afectación de las funciones neurológicas sensoriales, cognitivas o motoras o generación de defectos de tubo neural), especialmente considerables en aquellas personas más vulnerables como son los niños, que se hallan en desarrollo, o las mujeres embrazadas.
- Efectos endocrinos (disfunciones hormonales tiroideas o sexuales, diabetes…)
- Reproductivos (malformaciones de órganos sexuales, riesgo de abortos, trastornos menstruales, infertilidad…).
- Efectos respiratorios: en España, más del 80% de la población respira un aire impuro que supera los niveles recomendados en este ámbito por la Organización Mundial de la salud (OMS): tos, sensación de quemazón y sequedad de garganta, hemorragias nasales, etc.
- Efectos cardiovasculares (cardiopatía isquémica, accidentes vasculares cerebrales…).
- Efectos de inducción tumoral (efectos cancerígenos como, por ejemplo, el cáncer de mama, de vejiga, pulmón o piel, entre tantos otros).
- Efectos genéticos (efectos mutagénicos sobre generaciones venideras, transmitidas por los cromosomas de padres a hijos).
- Efectos psicológicos.
Prevención
La contaminación del aire, del agua y del suelo están muy relacionadas entre sí y no se pueden separar. Los contaminantes pasan fácilmente de un medio a otro, lo que complica la solución y los problemas de la contaminación ambiental.
Aunque lo ideal sería la eliminación de las fuentes contaminantes, cuando eso no está en nuestras manos, entonces se debe recurrir a la prevención. Algunas medidas que podrían mitigar los efectos nocivos de sustancias en el ambiente serían las siguientes:
- Lavado frecuente de manos.
- Hervir el agua de beber o consumir agua embotellada.
- Evitar el tabaquismo y no exponerse a ambiente de fumadores.
- Evitar realizar ejercicio físico en las zonas y horas de mayor polución ambiental.
- Promover el uso del transporte público en detrimento del privado y de otras formas de transporte menos contaminantes (bicicleta…)
Sería muy aconsejable la elaboración de campañas preventivas a nivel global, con implicación de todos los gobiernos mundiales, en la generación de programas de salud colectivos centrados en la prevención de estos riesgos. No existen fronteras para los tóxicos y éstos se ven dispersos a nivel global.
La población pediátrica es especialmente vulnerable a la polución química atmosférica por una inmadurez anatómica y fisiológica, entre otros factores. Los pediatras, además de diagnosticar y tratar las enfermedades asociadas a los contaminantes, tienen la obligación de participar activamente en su prevención.