El chocolate engorda, pero no tanto como dicen
La gente que quiere perder peso tiene tachado de su lista de alimentos el chocolate. Este alimento es de alta densidad calórica, de ahí que se suela eliminar de las dietas hipocalóricas, pero no por ello debe de ser un alimento prohibido, podemos incorporarlo a nuestra dieta sin echarnos las manos a la cabeza, eso sí, con una serie consideraciones.
El truco es saber controlar las cantidades. Si comemos 100 gramos, aproximadamente media tableta de chocolate, estamos ingiriendo 500 kcal de una sentada. Sin embargo, ingerir un cuadrito de chocolate sólo nos aportará unas 50 kcal, una cantidad casi despreciable y que podemos quemar subiendo por las escaleras a casa o andando unos 10 minutos.
Todo es tener fuerza de voluntad y saber racionar correctamente este tipo de alimentos altos en calorías. Si a ese trocito unimos un poco de helado, otro poco de tarta, bebidas azucaradas, gominolas y demás, al final suman una cantidad nada despreciable que es la que va lastrando nuestro peso.
El tipo de chocolate que escojamos va a ser crucial. Debemos evitar cualquier chocolate que sea inferior al 70% de cacao, puesto que su cantidad de azúcar será elevado. Tomar una onza de vez en cuando de chocolate negro superior al 70% no es perjudicial, incluso es recomendado por los beneficios del cacao, pero recuerda, cuánto más alto sea el % de cacao mejor. En el caso del cacao en polvo, olvídate de cualquier cacao cuyo ingrediente sea el azúcar y opta por el cacao desgrasado del 70% para arriba, siendo el cacao puro 100% la mejor opción.
Por eso es muy importante en un régimen de restricción calórico tener constancia de los alimentos que vamos consumiendo. Apuntarlos es una buena manera de saber cómo vamos consumiéndolos o hacer una lista con esos “alimentos prohibidos”, alternándolos según el día y como hemos dicho, no abusando de ellos. También es importante tener en cuenta el tipo de chocolate que comemos, ya que el chocolate negro es la mejor elección.
Imagen | Peter Pearson