Los mitos más extendidos sobre los antibióticos
Los antibióticos son importantes para tratar infecciones y han salvado innumerables vidas, tal y como subrayan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos. Existen múltiples mitos relacionados con estos medicamentos. Ni es cierto que sirvan para curar cualquier enfermedad ni que los mejores sean aquellos que eliminan más bacterias. Os desmentimos estas y otras desinformaciones al respecto.
Por qué los antibióticos no sirven para curar cualquier enfermedad
Una de las falsas creencias sobre los antibióticos es que sirven para curar cualquier enfermedad. La función de los antibióticos es eliminar bacterias. Por tanto, sólo son útiles para tratar enfermedades que estén causadas por estos microorganismos.
“Consumir antibióticos para tratar enfermedades no bacterianas no tiene ningún efecto”, afirma a Maldita.es Manuel Ares Arroyo, veterinario y microbiólogo especializado en la resistencia a los antibióticos.
Estos medicamentos, según subraya el experto, no son útiles para infecciones causadas por virus o infestaciones de parásitos. Entre las enfermedades que no se pueden tratar con antibióticos, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos mencionan los resfriados, la mayoría de los dolores de garganta o la gripe. Ver antibióticos en pediatría.
No, los mejores antibióticos no son los que eliminan más bacterias
Es falso el mito de que el mejor antibiótico es aquel que elimina más bacterias, tal y como indican desde la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS): “El cuerpo humano tiene un gran número de bacterias cuya actividad es beneficiosa para el organismo y, si las elimina el antibiótico, tendremos un impacto negativo en nuestra salud”.
Según Ares, el cuerpo humano contiene aproximadamente dos kilos de bacterias, “la mayoría de las cuales son necesarias para que funcione correctamente”. Algunos antibióticos que eliminan muchas bacterias pueden producir un desequilibrio en la microbiota intestinal, que “se puede traducir en síntomas digestivos, dolores de cabeza o debilidad”. Por lo tanto, “un buen antibiótico no es el que más bacterias mata, sino el que mata las pocas bacterias que queremos eliminar”.
Por qué la resistencia a los antibióticos no es sólo un problema para las personas que toman antibióticos
Un consumo inadecuado de los antibióticos sin cumplir con las indicaciones médicas hace que aparezcan infecciones resistentes, peligrosas y difíciles de tratar. No es cierto que la resistencia a los antibióticos sólo afecte a las personas que los consumen.
Tal y como señalan desde la OPS y la OMS, cualquier persona de cualquier edad y en cualquier país puede contraer una infección resistente a los antibióticos. Al menos 33.000 personas mueren al año en Europa directamente por infecciones de bacterias resistentes a antibióticos.
Los antibióticos están perdiendo eficacia a un ritmo que era impensable hace sólo cinco años, según el Ministerio de Sanidad, que colabora con el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos lanzado en 2014.
El organismo subraya que el uso incorrecto de los antibióticos sólo sirve para que las bacterias se vuelvan resistentes a estos medicamentos, de manera que, si una persona necesita tomarlos en el futuro, es posible que ya no surtan efecto.
En Maldita.es ya os hemos explicado que la principal causa es el abuso de antibióticos principalmente en la ganadería pero también al usarlos, por ejemplo, contra infecciones de virus (que son inmunes a los antibióticos) como la gripe, contra la fiebre o el dolor. Esto ha hecho que se favorezca la selección de esas poblaciones resistentes.
Durante la pandemia de COVID-19, entre los pacientes con coronavirus, el porcentaje de personas que tuvieron además otras infecciones bacterianas fue bajo, pero el uso de antibióticos fue alto, según una revisión científica. “Si en una persona se selecciona una bacteria resistente, esta puede transmitirse a otras personas aunque no hayan consumido antibióticos”, afirma Ares.
No, cuando consumimos carne no nos comemos los antibióticos que dan a los animales
Otra falsa creencia muy extendida, según subraya Ares, es que al consumir carne “nos comemos los antibióticos que dan a los animales”. Aunque es cierto que en las granjas se administran antibióticos, “hay un estricto control para que ese antibiótico (y cualquier medicamento) no llegue a la mesa”.
El veterinario explica que tras administrar un medicamento a un animal de granja, es obligatorio esperar un tiempo mínimo antes de sacrificarlo para el consumo: “Ese tiempo, denominado tiempo de supresión, es específico para cada sustancia y garantiza que no haya restos de medicamentos en la comida que ingerimos”. En Maldita.es también os hemos contado por qué no hay evidencias de que estemos tomando antibióticos cuando comemos pescado.
Por qué no es aconsejable usar los antibióticos que te han sobrado de ocasiones anteriores
Si crees que necesitas un antibiótico, ¿puedes tomar uno que tengas por casa porque te sobró en el pasado? Nunca deberías hacerlo, según afirma la farmacéutica y maldita que nos ha prestado sus superpoderes Marta Valenti Sanguino, que está haciendo un doctorado en microbiología.
“Primero necesitamos que un médico haga un diagnóstico para asegurarnos de que la infección es bacteriana y que es necesario aplicar un tratamiento antibiótico”, afirma. En función de las características del paciente, el tipo de infección, la localización de la misma y la bacteria que la cause, “será necesario ajustar al tratamiento en dosis y duración”.
Esto es especialmente importante porque “si una bacteria se enfrenta a un antibiótico, este le hará daño, pero si la dosis o la duración del tratamiento no es suficiente como para eliminarla completamente, aprenderá de este enfrentamiento y desarrollará mecanismos que le permitan sobrevivir a una nueva batalla”. Las bacterias “tienen una capacidad increíble de adaptarse a nuevos ambientes de forma muy rápida”.
Si te has olvidado de tomar una dosis, ¿puedes tomar dos juntas?
Nunca se deben tomar dos dosis juntas de ningún medicamento independientemente de que sea un antibiótico o no, según Valenti. “Esto ya no tiene tanto que ver con la resistencia a los antibióticos como con la seguridad de los medicamentos”, explica.
Todo fármaco es sometido a un exhaustivo proceso de evaluación para garantizar su seguridad, siempre y cuando el paciente lo tome en las condiciones en las que se aprueba. La farmacéutica desaconseja tomar una dosis doble de un medicamento porque puede suponer un riesgo para la salud, “salvo que así lo indique explícitamente el prospecto”.
¿Las bebidas alcohólicas interfieren con los antibióticos?
Una de las creencias más extendidas es que no se puede beber nada de alcohol si se están tomando antibióticos. Tal y como indica el sistema público de salud de Reino Unido (NHS, por sus siglas en inglés), es una buena idea evitar el consumo de alcohol cuando se toman medicamentos o uno se siente mal.
Pero “es poco probable que beber alcohol con moderación cause problemas si están tomando los antibióticos más comunes”. Sin embargo, según subraya el organismo, algunos antibióticos pueden tener efectos secundarios (como náuseas o mareos) que pueden empeorar con el consumo de alcohol.
En este artículo han colaborado con sus superpoderes los malditos Marta Valenti Sanguino y Manuel Ares Arroyo.
Gracias a vuestros superpoderes, conocimientos y experiencia podemos luchar más y mejor contra la mentira. La comunidad de Maldita.es sois imprescindibles para parar la desinformación. Ayúdanos en esta batalla: mándanos los bulos que te lleguen a nuestro servicio de Whatsapp, préstanos tus superpoderes, difunde nuestros desmentidos y hazte Embajador.
“Menos bulos, más rigor científico” es un proyecto de DKV Salud con contenido editorial de Maldita.es.
Bloque producto - seguro de salud general
Productos y servicios relacionados