Menarquia, lo que necesitas saber sobre la primera regla

Creado el
24 Nov 2021
Modificado el
23 Mayo 2025
Tiempo de lectura
11 minutos
La menarquia es un antes y un después en la vida de las niñas. Es el momento en el que el cuerpo comienza a cambiar y da paso a la etapa de la adolescencia.
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La menarquia, la primera regla, representa un momento clave en el desarrollo físico y hormonal, señalando el comienzo de la madurez reproductiva.
  1. ¿Qué es la menarquia y cuándo se produce?

  2. ¿Qué diferencia hay entre menstruación y menarquia?

  3. ¿Cuál es la edad normal de la menarquia?

  4. Características normales y alteraciones en la menarquia

  5. El papel de los padres

  6. Cuándo acudir al médico

El inicio de la menstruación, conocido como menarquia, es uno de los hitos más importantes en el desarrollo físico y hormonal de las niñas. Aunque es un proceso natural, suele generar dudas, inquietudes e incluso miedo, tanto en quienes lo experimentan como en sus familias. Comprender qué es la menarquia, qué significa, cuándo suele producirse y qué señales la anuncian ayuda a vivir este momento con mayor tranquilidad.

La llegada de la primera regla no solo implica cambios físicos visibles, como el crecimiento de los pechos o la aparición de vello, sino también transformaciones internas relacionadas con la madurez sexual. Informarse sobre la ella es clave para acompañar este proceso con confianza, resolver posibles inquietudes y cuidar la salud ginecológica desde el principio.

¿Qué es la menarquia y cuándo se produce?

La menarquia es el término médico que se utiliza para describir la primera menstruación en la vida de una niña. Es un momento clave que marca el final de la pubertad y el comienzo de la etapa fértil. Para muchas adolescentes y sus familias, entender qué es ayuda a afrontar este proceso con mayor confianza y naturalidad.

Normalmente, la menarquia ocurre entre los 10 y los 15 años, aunque la edad puede variar según factores genéticos, nutricionales y ambientales. En los últimos años, diversos estudios han observado que la edad media de la menarquia ha disminuido, situándose alrededor de los 12 años en muchos países desarrollados.

La llegada de la primera regla no sigue un calendario exacto. Algunos signos pueden indicar que la menarquia está próxima, como el desarrollo de los pechos, la aparición de vello púbico y axilar, o cambios en la silueta corporal. Estos síntomas reflejan que el cuerpo se está preparando para iniciar el ciclo menstrual.

Ésta no solo señala un cambio físico; también implica un cambio emocional y social. Por ello, es importante hablar abiertamente sobre este proceso y resolver todas las dudas que puedan surgir.

¿Qué diferencia hay entre menstruación y menarquia?

Aunque a menudo se utilizan como sinónimos, menstruación y menarquia no significan lo mismo. La menstruación es el proceso cíclico que ocurre en las mujeres cuando no hay fecundación del óvulo, y consiste en la expulsión de sangre y tejido del útero a través de la vagina. Este proceso se repite aproximadamente cada 28 días y forma parte del ciclo menstrual.

En cambio, la menarquia hace referencia, de forma específica, a la primera menstruación que experimenta una niña. Es decir, es un momento puntual dentro de la vida reproductiva de la mujer: el día en que aparece por primera vez el sangrado menstrual.

A partir de la menarquia, la menstruación pasa a formar parte de la rutina mensual, siempre que no exista un embarazo o algún problema hormonal. Por tanto, podemos decir que la menarquia es el inicio y la menstruación es el proceso que continuará durante años, hasta la llegada de la menopausia.

Esta diferencia es clave para entender la relevancia de ésta como señal del comienzo de la madurez sexual.

¿Cuál es la edad normal de la menarquia?

Aunque actualmente la media en países europeos de la menarquia son los 12 años, tanto si la primera menstruación llega antes como después de ese rango, no siempre implica un problema de salud.

Se considera menarquia precoz cuando aparece antes de los 9 años, y menarquia tardía cuando no se ha producido pasados los 15 o 16 años. En estos casos, conviene consultar con un profesional para valorar posibles causas hormonales, genéticas o nutricionales.

Es importante que las familias sepan que cada niña tiene su propio ritmo. La menarquia no llega de forma repentina: suele ir acompañada de signos previos como el desarrollo de las mamas, el aumento de estatura y la aparición de vello corporal.

menarquia, la primera regla
Saber qué es la menarquia permite acompañar a las niñas en un momento clave de su crecimiento y madurez sexual.

Factores que influyen en la edad de la menarquia

La edad a la que aparece la menarquia está condicionada por varios factores:

  • Genética. La edad de la primera regla suele parecerse a la de la madre o hermanas.

  • Nutrición. Una alimentación equilibrada favorece el desarrollo normal. El exceso o déficit de peso puede adelantarla o retrasarla.

  • Actividad física. El deporte intenso, especialmente en niñas atletas, puede retrasar la aparición de la menarquia.

  • Condiciones de salud. Enfermedades crónicas, alteraciones hormonales o desnutrición pueden influir en la edad de la primera menstruación.

  • Entorno social y psicológico. El estrés, el contexto familiar o situaciones adversas también pueden afectar al inicio del ciclo menstrual.

Características normales y alteraciones en la menarquia

La menarquia es un proceso natural que, aunque pueda generar dudas, forma parte del desarrollo saludable de la niña. Lo habitual es que la primera menstruación sea irregular durante los primeros meses o incluso años, ya que el cuerpo necesita tiempo para ajustar el equilibrio hormonal.

Algunas características normales son:

  • Duración variable: el sangrado puede durar entre 2 y 7 días.

  • Flujo irregular: al principio, la cantidad de sangre suele ser escasa y puede variar cada mes.

  • Color del flujo: puede oscilar entre rojo intenso y marrón oscuro.

  • Síntomas físicos: cólicos leves, hinchazón abdominal, sensibilidad en los pechos o cambios de humor.

El papel de los padres

El papel de la familia, y especialmente de los padres, es fundamental para que la llegada de la menarquia se viva como un proceso natural y positivo. Para muchas niñas, este momento puede ir acompañado de dudas, vergüenza o incluso miedo, por lo que el acompañamiento emocional es clave.

Algunas recomendaciones para los padres son:

  • Hablar sobre la menarquia antes de que ocurra. Explicar de forma sencilla y adaptada a la edad qué es y por qué ocurre ayudará a que la niña no se asuste cuando llegue el momento.

  • Resolver sus dudas sin tabúes. Es importante que pueda preguntar libremente y que reciba información clara, sin dramatismos.

  • Transmitir tranquilidad y normalidad. La menstruación no debe vivirse como un problema, sino como un signo de que el cuerpo está creciendo.

  • Acompañar en los cambios. Ayudarla a gestionar los primeros síntomas, elegir productos de higiene menstrual y entender cómo funciona su ciclo.

Además, conviene fomentar la autoestima y el autocuidado desde la infancia, evitando comentarios negativos sobre la menstruación o el cuerpo. Una buena educación menstrual contribuye a una relación saludable con el propio cuerpo y con la sexualidad.

Cuándo acudir al médico

Aunque es un proceso natural y, en la mayoría de los casos, no requiere atención médica específica, existen algunas situaciones en las que sí conviene consultar con un profesional de salud.

Es recomendable acudir al médico en los siguientes casos:

  • Menarquia precoz. Cuando la primera menstruación ocurre antes de los 9 años.

  • Ausencia de menarquia. Si no ha aparecido la regla después de los 15 años, especialmente si no hay otros signos de desarrollo puberal.

  • Sangrados muy abundantes. Si el flujo menstrual es excesivo, dura más de 7 días o provoca anemia.

  • Dolor menstrual incapacitante. Cuando los cólicos son intensos y afectan a la vida diaria.

  • Ciclos menstruales muy irregulares. Si después de un año o más la menstruación continúa siendo irregular.

  • Otros síntomas preocupantes. Como pérdida excesiva de peso, fatiga extrema, vello facial excesivo o ausencia de crecimiento mamario.

Un diagnóstico temprano permite descartar problemas hormonales, ginecológicos o de salud general. Además, acudir al ginecólogo después de la menarquia es una oportunidad para resolver dudas, hablar sobre anticoncepción y recibir educación menstrual adecuada.

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Preguntas frecuentes sobre la menarquia

Respondemos a las preguntas más recurrentes sobre la menarquia

¿Es normal sentir dolor en la menarquia?

Sí, es habitual sentir molestias o cólicos durante la menarquia, ya que el útero comienza a contraerse para expulsar el endometrio. Si el dolor es muy intenso o incapacitante, conviene consultar con un especialista para descartar alteraciones.

¿Qué productos de higiene menstrual se recomiendan tras la menarquia?

En las primeras menstruaciones, lo recomendable son las compresas para facilitar el manejo y la comodidad. A medida que la niña adquiera confianza, puede valorar el uso de tampones, copa menstrual u otros productos adaptados a su edad.

¿Puede la menarquia afectar al estado de ánimo?

Sí, los cambios hormonales asociados a la menarquia pueden provocar irritabilidad, tristeza, nerviosismo o sensibilidad emocional. Estos síntomas suelen ser transitorios y forman parte del proceso de adaptación del cuerpo al nuevo ciclo hormonal.

¿La menarquia puede alterar el rendimiento escolar?

Algunas niñas pueden experimentar fatiga, molestias o dificultad de concentración durante los primeros días de la menstruación. Hablar con el entorno escolar y ofrecer apoyo ayuda a normalizar la situación y evitar que afecte al aprendizaje.

¿Qué alimentación es recomendable tras la menarquia?

Mantener una dieta equilibrada rica en hierro, frutas, verduras y proteínas es esencial tras la menarquia, especialmente para prevenir la anemia. También conviene fomentar la hidratación y evitar alimentos ultraprocesados que puedan agravar la retención de líquidos.

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Isabel
Autor/a: Isabel Giménez Blasco

Con 15 años de experiencia médica, desde el 2011 Isabel Giménez Blasco trabaja en la Unidad de Reproducción Asistida del Hospital Quirón de Zaragoza, donde con su trabajo apoya la ilusión de ser madre de muchas mujeres.

Médico en la Unidad de Reproducción Asistida y de Obstetricia y Ginecología en la Unidad de Ginecología del