Causas del insomnio, un trastorno del sueño muy común
El insomnio es un trastorno del sueño muy frecuente que dificulta conciliar el sueño o hace que este sea breve y ligero. Las personas afectadas por el insomnio a veces tardan mucho en dormirse, o se despiertan demasiado pronto y son incapaces de volver a quedarse dormidas. Esto tiene una serie de consecuencias para la salud y la calidad de vida que no conviene ignorar.
En este e-book conocerás cómo afecta el sueño a tu salud, los diferentes trastornos del sueño, consejos de alimentación para facilitar el descanso, trucos y posturas para dormir mejor. Además, podrás realizar un test para medir tu calidad de sueño.
¿Cuáles son las causas del insomnio?
Las causas del insomnio pueden proceder de muchas fuentes distintas. En muchas ocasiones, se debe al estado de ánimo. Desde pequeñas preocupaciones que mantienen el cerebro demasiado activo como para conciliar el sueño hasta el miedo, la angustia o la tristeza, la situación emocional de una persona puede impedir o dificultar el descanso. Este tipo de insomnio puede generar ansiedad relacionada con el propio hecho de irse a la cama, creando un bucle que puede cronificar el trastorno.
También puede tener su origen en una enfermedad o problema fisiológico que cause molestias que interrumpan el sueño. Algo tan sencillo como una rozadura en una zona especialmente molesta puede causar picores que hagan difícil conciliar el sueño y, en caso de lesiones más graves, puede resultar imposible dormir sin medicación. Además, algunas enfermedades, llamadas parasomnias, afectan específicamente al descanso, como la apnea del sueño, que afecta a la calidad del sueño hasta tal punto que quienes la padecen pueden sentir que no han descansado pese a haber dormido ocho horas. Otras parasomnias, como las convulsiones o el sonambulismo, pueden causar agotamiento muscular y dejar una sensación de cansancio durante las horas de vigilia.
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Pero no son solo las enfermedades físicas las que pueden causar alteraciones en el sueño. Algunas enfermedades psiquiátricas, como la depresión, están estrechamente asociadas al insomnio.
Hay causas del insomnio que derivan de hábitos o circunstancias del entorno. Los cambios bruscos de horario, una higiene del sueño pobre, factores ambientales como la luz o el ruido y el consumo de ciertas sustancias pueden afectar al sueño incluso a largo plazo.
¿Qué consecuencias negativas tiene el insomnio?
La duración del periodo de insomnio influye en gran medida en sus consecuencias. Un insomnio transitorio, que puede venir causado por cualquier factor personal o ambiental, desaparece tras unos días y no suele presentar dificultades una vez desaparece. El insomnio agudo, si no se presta atención a la causa, puede cronificarse, y el insomnio crónico puede durar meses, con el consiguiente deterioro de la salud de la persona que lo padece.
El insomnio afecta de forma diferente a cada persona. Hay quienes describen sensaciones de cansancio generalizadas, pérdida de atención o irritabilidad, pero también, en especial si se combina el insomnio con otros problemas, pueden ocurrir microsueños, en los que una persona se queda dormida durante un breve espacio de tiempo sin darse cuenta, entre otros síntomas peligrosos.
La falta de descanso prolongada puede afectar al ánimo y agravar o causar trastornos psicológicos, además de causar síntomas fisiológicos como dolores de cabeza, mareos, visión borrosa, agotamiento muscular y debilidad. Además de la forma en que esto afecta a la calidad de vida, puede poner a la persona que los padece en situaciones de grave peligro, como es el caso de conductores y personas con profesiones de riesgo.
También puede afectar a la capacidad de una persona para realizar tareas sencillas y cotidianas y facilitar olvidos y distracciones. La agilidad mental puede reducirse y afectar a funciones tan básicas como el habla y los movimientos finos y precisos.
¿Cómo se puede prevenir o aliviar el insomnio?
Cuando se tratan las causas del insomnio, este suele desaparecer o volverse más leve, por lo que la principal forma de enfrentarse a él es tratar la causa. Puede ser necesario eliminar o reducir las molestias que impiden el sueño mediante barreras físicas, como antifaces para bloquear la luz o tapones para bloquear el sonido, o mediante atención y tratamiento a las ansiedades y miedos y dificultan el descanso.
Cuando no es posible deshacerse de las causas del insomnio, hay medicación específica destinada a facilitar el sueño, aunque suele emplearse como un complemento temporal a otro tipo de tratamiento.
Como cada caso de insomnio puede ser muy diferente a los demás, es conveniente buscar ayuda profesional para identificar las causas y encontrar soluciones. En ocasiones puede ser necesario un tratamiento de larga duración, pero el deterioro de la salud que causa un insomnio crónico no puede ignorarse.
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