¿Es eficaz la faseolamina en la pérdida de peso?
Llegó el verano y con él la preocupación de muchas personas de bajar de peso rápidamente. El mercado está lleno de diferentes productos que contribuyen a la pérdida de peso, uno de ellos es la faseolamina, una proteína procedente de la judía blanca, que se utiliza para inhibir la absorción de los carbohidratos de los alimentos.
Pero… ¿Es realmente eficaz? En este artículo intentaremos despejar algunas dudas.
¿Qué es la faseolamina?
La faseolamina es una glicoproteína que se extrae de la vaina madura de las judías blancas, su nombre científico es Phaseolus vulgaris, y se utiliza para inhibir la absorción de los hidratos de carbono.
¿Qué son los hidratos de carbono o carbohidratos? Estos son uno de los grupos principales de alimentos y son los que nos aportan energía para realizar diferentes actividades. Existen los carbohidratos simples, llamados monosacáridos como la glucosa o la fructosa que se absorben rápidamente; y los complejos, llamados también polisacáridos como el almidón, que se encuentra en los cereales, el pan, las patatas, las legumbres y que se absorben lentamente.
¿Cuáles son los beneficios del consumo de faseolamina?
El principal beneficio de la faseolamina es que actúa inhibiendo una enzima, (una enzima es una molécula que interviene en las reacciones químicas que ocurren dentro de la célula) la alfa-amilasa, que es la responsable de “romper” los polisacáridos o carbohidratos complejos, en moléculas más pequeñas.
Esta enzima podemos encontrarla en la saliva (amilasa salival) o en el páncreas (amilasa pancreática) donde ocurre la mayor parte de la digestión de los carbohidratos.
La faseolamina se une a la alfa-amilasa (sobre todo la amilasa pancreática) bloqueando la acción que ejerce sobre las moléculas de almidón, de esta forma, impide su transformación a glucosa y por tanto su absorción. Al no absorberse estos carbohidratos impide su consiguiente aporte calórico.
Es muy común el uso de la faseolamina en las personas que están en procesos de pérdida de peso. Existen algunos estudios que demuestran que la faseolamina puede ser positiva en estos procesos, aunque aún no son del todo certeros.
Lo cierto es que al inhibir parte de la absorción de los carbohidratos de la dieta, se pueden ingerir, en momentos puntuales, comidas con un contenido más elevado en este nutriente sin que afecte negativamente a la dieta.
Lo que sí tenemos que tener en cuenta es que, cuando una persona sigue un plan para bajar de peso, lo realmente importante es poder realizar un cambio de hábitos alimenticios, para poder comer de forma saludable sin tener que recurrir a determinados complementos diariamente..
La faseolamina puede ser positiva en casos puntuales, como por ejemplo ante situaciones especiales en las que se sabe, de antemano, que va a haber un consumo excesivo de carbohidratos, como algún cumpleaños o fiesta, y queremos evitar que este exceso afecte negativamente en el cuerpo.
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¿Presenta alguna contraindicación su consumo?
Cuando hablamos de complementos alimenticios siempre debemos consultar, antes de su consumo, a un profesional para que nos oriente y sepamos si su consumo es seguro o no.
La faseolamina, como ya dijimos, puede ser beneficiosa en momentos puntuales. Además, cada organismo es diferente y por lo tanto va a actuar de manera distinta ante su consumo. Siempre es recomendable seguir una alimentación saludable, sin una ingesta excesiva de carbohidratos. De esta forma, la faseolamina puede ser una aliada más en el proceso de pérdida de peso.
Algunos estudios concluyen que la faseolamina puede llegar a reducir hasta aproximadamente un 66% de las calorías procedentes de los carbohidratos. Generalmente no presenta efectos adversos, aunque algunas personas manifiestan haber tenido un exceso de gases tras su consumo.
Aunque como ya dijimos, siempre hay que consultar con un profesional antes de empezar a consumir un complemento alimenticio.
En situaciones particulares como el embarazo, la lactancia o en personas con diabetes, no es aconsejable el consumo de faseolamina.
¿Cómo se toma la faseolamina?
Se ingiere antes de una comida alta en carbohidratos (patatas, pastas, legumbres, pan…). Su efecto dura aproximadamente una hora por lo que conviene tomarla poco antes de la comida. La dosis recomendada es de 500 a 1500 mg.
Igualmente, para que la faseolamina tenga el resultado deseado, es importante seguir un plan de alimentación equilibrado, en el que haya un aporte de todos los nutrientes en su justa medida y que no haya exceso de alimentos “chatarra”.
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Conclusiones
Es importante que, siempre que sigas un plan para bajar de peso o si estás pensando en tomar algún tipo de complemento, consultes antes con un profesional.
Los bloqueadores de carbohidratos, como la faseolamina, pueden ser eficaces en momentos puntuales, pero si no sigues una alimentación adecuada, una vez que dejes de consumir cualquier tipo de complemento, existe la posibilidad de un efecto rebote con el que acabarás recuperando el peso que perdiste.
Sabemos que el sobrepeso y la obesidad pueden acarrear diferentes problemas en nuestro organismo, es por ello que lo mejor siempre es hacer una reeducación alimentaria, en la que haya un cambio de hábitos que incluya llevar una alimentación adecuada y un plan de ejercicios regular, para poder mantener la pérdida de peso en el tiempo, ¡¿estáis de acuerdo?!
Referencias:
En esta guía encontrarás recetas sanas y fáciles para seguir un estilo de vida saludable en verano: ensaladas con bases de fruta de temporada, cremas y sopas frías, picoteo saludable para llevar a la playa o a la montaña y refrescos y bebidas sin azúcar y sin alcohol para toda la familia.
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