Claustrofobia: síntomas, causas y tratamiento
Todos hemos escuchado hablar sobre la claustrofobia. Este es el miedo o pánico ante la situación de quedarse encerrado en un espacio del que creen que no van a poder salir fácilmente, como puede ser un ascensor, una cueva, un túnel o la máquina de resonancia magnética. Pero, ¿tiene tratamiento? ¿Una persona con esta fobia puede llegar a superarla?
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Qué es la claustrofobia
Como ya hemos avanzado, la claustrofobia es un trastorno de ansiedad de tipo fóbico, donde la persona presenta un miedo irracional, intenso e incontrolable causado por estar en lugares cerrados de los que piensa que no va a ser fácil salir. Es una de las fobias más comunes que existen, afectando por igual a hombres y mujeres, y a un rango entre el 6 o el 7% de la población mundial, aunque de este tanto por ciento pocos se encuentran diagnosticados y tratados.
El miedo que sienten las personas al tener claustrofobia puede darse por un miedo a la restricción, es decir a no poder moverse, como podría ser quedarse encerrado en un lugar de muy pequeñas dimensiones, por ejemplo quedarse encerrado en el coche y pensar que la persona va a quedarse sin aire independientemente de las dimensiones del espacio.
Los síntomas que pueden observarse de una persona con este trastorno de tipo fóbico se pueden diferenciar en fisiológicos, cognitivos y conductuales
Los síntomas fisiológicos de la claustrofobia son:
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Dificultad para respirar con sensación de ahogo o asfixia.
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Sudoración, taquicardia y palpitaciones.
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Mareos y sensación de desmayo.
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Temblores.
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Nerviosismo, hiperventilación e inquietud.
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Sentirse débil, confundido, desorientado o aturdido.
Los síntomas cognitivos de la claustrofobia son:
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Ansiedad y ansiedad anticipatoria sobre lo que puede ocurrir en determinada situación, como coger un ascensor y tener ansiedad por situaciones que pueden ocurrir, entre ellas poder quedarse encerrado y que nadie venga a buscar a la persona, quedarse sin aire o que se caiga el ascensor.
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Dificultad para pensar con claridad, teniendo pensamientos catastróficos, irracionales y sobredimensionados sobre el peligro real que está viviendo.
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Pánico, terror y miedo a morir.
Los síntomas conductuales de la claustrofobia son:
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Conductas de acercamiento a puertas y ventanas como búsqueda incesante de salidas.
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Conductas de evitación o escape de las situaciones que dan miedo como subir 30 escaleras para llegar a casa, en vez de coger el ascensor o ir andando siempre a cualquier lugar en vez de coger el metro. Estas conductas de evitación también se llaman respuestas de seguridad, y aunque visto desde fuera son situaciones normales, no se pueden implementar en cualquier situación, por ejemplo si se desea ir a un lugar que está muy lejos, la persona deberá coger el transporte público sí o sí.
Por qué las personas tienen claustrofobia
Entre las causas más comunes de poder sufrir ataques de pánico por permanecer en espacios cerrados están las experiencias traumáticas vivida en primera persona o tercera persona, es decir que esta experiencia la haya vivido un familiar, amigo o conocido y se haya aprendido de esa experiencia, adquiriendo el miedo.
Algunas personas pueden desarrollar este miedo por haber vivido una situación pasada de haberse quedado encerrado en algún sitio pequeño, cuando años después se recuerda este hecho, se activan las alarmas y aparecen los síntomas de miedo. Como consecuencia de estos pensamientos, la persona intenta escapar de esa situación a toda costa con conductas de evitación para no hacer frente a la ansiedad que genera esa situación, lo que hace que no regule la emoción y se enquiste durante mucho tiempo, sin poder llegar a tratarla.
Tratamiento psicológico
El tratamiento para la claustrofobia suele ser psicológico, aunque muchas veces se suplementa con medicación, donde se pueden utilizar fármacos como antidepresivos o ansiolíticos para paliar la sintomatología de ansiedad. Y como con cualquier trastorno, el tratamiento farmacológico no es suficiente y siempre se debe complementar con tratamiento psicológico.
Aunque es un trastorno difícil de curar debido al pensamiento irracional, ya que la persona aunque sabe que el espacio cerrado no representa ningún peligro para la vida real, cuando están dentro de este espacio pueden llegar a sufrir síntomas de pánico extremos, con la ayuda de un psicólogo y mucho tiempo, el miedo se puede ir superando.
Cuáles son las mejores terapias para tratar este trastorno
Las mejores terapias para la claustrofobia son:
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La terapia de exposición es aquella que diseña un plan de exposición gradual y programada a las situaciones de fobia para ir normalizándolas. Dentro de esta terapia se coloca a la persona ante una situación no peligrosa para confrontarla y superar el temor.
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La terapia cognitivo conductual es aquella terapia que enseña a controlar y alterar los pensamientos negativos que surgen de sufrir situaciones que desencadenan sentimientos de pánico. Al aprender a cambiar los pensamientos negativos, la persona es capaz de cambiar la reacción ante estas situaciones.
Todas estas terapias se pueden suplementar con técnicas de relajación que ayudan a manejar los niveles de ansiedad e hiperactivación del sistema nervioso cuando la persona está ante situaciones que le generan pánico. Una de las técnicas es contar de manera progresiva y lentamente del 1 al 10 o imaginar que se está en un espacio seguro.
Nuestra recomendación para cuando la persona está viviendo una situación de claustrofobia es no resistirse al ataque cuando está sucediendo, sino aceptar que está sucediendo y aplicar las técnicas aprendidas. Visualiza un lugar o momento que te de calma y enfocándote en algo seguro mientras se respira lento y profundo.
Recuerda… las personas con claustrofobia suelen encontrar vías de escape para no tener que vivir la situación que les da miedo. Escapar de estas situaciones interfiere en la vida y en la calidad de vida de las personas, muchas veces teniendo que rechazar situaciones por no poder acceder a ellas, como por ejemplo la necesidad de realizarse una resonancia magnética y no poder ir al médico por miedo a meterse en la máquina. Es por eso, que si se tiene este trastorno es muy importante buscar la ayuda de un profesional para tratarlo.
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Referencias:
Preguntas frecuentes sobre la claustrofobia
¿Cuál es la diferencia entre claustrofobia y agorafobia?
La claustrofobia es la fobia a los espacios cerrados y por lo contrario la agorafobia es la fobia a los espacios abiertos o lugares públicos.
¿Qué le puede pasar a una persona con claustrofobia?
Racionalmente a la persona que se encuentra en un sitio encerrado no debe pasarle nada, sin embargo debido a la sintomatología irracional que vive pueden tener un ataque de pánico muy intenso y tener que ir de urgencias.
¿Cómo superar la claustrofobia en una resonancia magnética?
El miedo a la máquina que realiza la resonancia magnética es muy común, ya que es un espacio muy pequeño en el que no te puedes mover. Cuando te pongas en el tubo para realizar esta prueba de imagen mantén los ojos cerrados, céntrate en la respiración, y cuenta del 1 al 10 lentamente e intenta mantenerte lo más cómodo posible.
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