Entrenamiento mental contra la desmotivación, ¡aplícalo!

Creado el
12 Abr 2024
Modificado el
14 Nov 2024
Tiempo de lectura
8 minutos
Un alto porcentaje de población está desmotivada con varios aspectos de su vida. Aplicar un entrenamiento mental contra la desmotivación puede ser muy útil.
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Entrenamiento mental contra la desmotivación

La desmotivación es la pérdida del entusiasmo, de la energía y del motor de impulso que nos permite llevar a cabo determinadas actividades. Es un sentimiento de desesperanza y pesimismo que surge cuando nos enfrentamos a determinados obstáculos o metas. Algunos síntomas que se pueden observar en la desmotivación son la pérdida de interés por satisfacer necesidades básicas como asearse o comer, pensamientos negativos sobre sí mismo y su alrededor, cambios en el estado de ánimo, como irritabilidad, frustración, apatía y desesperanza y cambios en los hábitos del sueño como insomnio. Para evitar todo esto, te sugerimos poner en práctica un entrenamiento mental contra la desmotivación eficaz, que te ayude a poner un nuevo rumbo a tu vida. 

  1. Claves para un buen entrenamiento mental contra la desmotivación

  2. Mantén los objetivos

  3. Revisa de manera regular los objetivos

  4. Dosis de motivación

  5. Tomar un descanso

Claves para un buen entrenamiento mental contra la desmotivación

Para comenzar con un entrenamiento mental para la desmotivación, primero hay que aceptar que la persona se siente desmotivada. Para ello, es imprescindible observar si se cumplen algunos síntomas como:

  • Pérdida de motivación e interés en general.

  • Menor actividad y productividad laboral, incluida la reducción de actividades de ocio y sociales y disminución del tiempo dedicado a actividades de interés.

  • Pérdida de iniciativa o perseverancia.

  • Escasa atracción por las situaciones nuevas.

  • Abandono del cuidado personal y de la salud. 

  • Falta de respuesta emocional, tanto de emociones positivas como negativas.

Una vez se compruebe que la persona siente apatía extrema y desmotivación para realizar actividades, se puede poner en acción el entrenamiento mental para estimular la motivación.

entrenamiento mental contra la desmotivacion

Ten presente los objetivos, planifica pequeñas metas y establece un plan de acción

Es difícil mantenerse motivado si no se está seguro de lo que se quiere lograr. Es importante tomarse un tiempo para establecer objetivos y metas realistas, alcanzables y específicas. Es imprescindible centrarse en planificar pequeñas metas que vuelvan a motivar a la persona en todas las áreas de su vida.

Un entrenamiento mental contra la desmotivación es lo que puede ayudar a trabajar ciertas metas y objetivos para sentirse y estar motivado.

¿Qué cambios se quieren realizar para volver a sentir motivación? Laboralmente, es importante recordar los objetivos que hicieron emprender ese camino. Por eso, es necesario tomarse un tiempo para buscar qué objetivos se quieren lograr en el trabajo. Una vez se tengan planificados los objetivos (laboralmente o emocionalmente como reconectar con amistades o mantener un hogar ordenado) se debe establecer un plan de acción. Puede ser útil dividir los objetivos en tareas pequeñas y fáciles y fijar recordatorios regulares. 

Dentro del plan de acción se debe establecer una rutina para cumplir los objetivos y para encontrar momentos en los que se puedan hacer actividades que mantengan feliz a la persona. Está bien planificar metas pero es imprescindible que vayan acompañadas de descansos y relajación, para evitar que el estrés influya en los objetivos.

Mantén los objetivos

Se debe tener conciencia de los objetivos e incluirlos en las rutinas. Te será muy útil programar recordatorios. Es importante practicar el diálogo interno para racionalizar los pensamientos negativos y hablarnos de manera positiva. En lugar de decir “no puedo” se debe cambiar por “puedo intentarlo”. Gracias a esto, será más fácil mantener los objetivos, ya que nos ayudará a subir la autoestima y a sentirnos más motivados para cumplir las metas.

Revisa de manera regular los objetivos

Ver el progreso de los objetivos es una buena manera de sentirse motivado y con la autoestima alta, llevando a cabo un entrenamiento mental contra la desmotivación para, poco a poco, ir comprobando que es posible abordar un objetivo y cumplirlo. A medida que se vayan cumpliendo objetivos, hay que ir planificando unos nuevos. Se pueden organizar objetivos divididos en semanas, meses y en el próximo año, yendo de metas más pequeñas a más grandes.

¿Te has sentido alguna vez atrapado en una espiral de desmotivación que parece no tener fin?  Descubre cómo distinguir entre la motivación intrínseca y extrínseca, y cómo cada una puede influir en tu capacidad para mantener la pasión por tus metas y actividades. 

Dosis de motivación

Celebrar los logros, incluso los más pequeños, es importante e imprescindible para mantenerse motivado. 

Aunque es imposible sentirse motivado las 24 horas del día, se pueden dedicar 10 minutos al acabar el día para escribir qué cosas se han logrado o que se han hecho bien durante el día. Valorar el esfuerzo que se pone para realizar cualquier acción, como por ejemplo quitarse el pijama y empezar el día haciendo algo productivo, permitirá disfrutar de lo que se está haciendo y olvidar poco a poco el desaliento que invade a la persona; un entrenamiento mental contra la desmotivación que debe realizarse a diario.

Tomar un descanso

Muchas veces la desmotivación viene cuando la persona no logra avanzar y se siente saturada de información. Es importante conocerse y autoevaluarse para saber qué es aquello que le desmotiva y tomarse un descanso para verlo desde otra perspectiva. Es un entrenamiento mental contra la desmotivación que debe seguirse a diario y entender que a veces, es necesario parar para poder tener otra mirada de la situación en particular. 

Tomar un descanso ayudará a recargar pilas y verlo todo de manera fresca. Así que, cuando haya saturación y llegue la desmotivación, es importante dejar lo que se está haciendo y tomarse unos minutos para realizar un descanso: salir a caminar, ir al cine o bien, pararse a leer o desarrollar una actividad placentera nos ayudará a volver a lo que se estaba haciendo más motivados. 

Es útil hacer algo diferente para cambiar la perspectiva si la causa de la desmotivación es sentirse atrapado en la rutina. No se trata de hacer algo muy descabellado, sino simplemente tomarse un día libre para hacer algo que normalmente no se está acostumbrado ha hacer, como puede ser pasar un día entero en la montaña para respirar aire puro o bien cambiar completamente la rutina, si la que se estaba realizando promueve la desmotivación.

Con estas pautas claras, solo queda la parte más importante: poner en práctica tu entrenamiento mental contra la desmotivación. Recuerda que siempre que no se pueda realizar de manera individual, es importante reconocer que se necesita ayuda. Consulta con un psicólogo si la desmotivación persiste durante mucho tiempo, te ayudará a encontrar las causas y además, te proporcionará estrategias y herramientas que puedan funcionarte.

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Referencias

Preguntas frecuentes sobre entrenamiento mental contra la desmotivación

Respondemos a las preguntas más recurrentes sobre entrenamiento mental contra la desmotivación

¿Por qué me siento tan desmotivado?

Existen distintos factores que causan desmotivación: la falta de confianza, el cansancio, no tener unos buenos objetivos o metas marcados, falta de reconocimiento o afrontar demasiados desafíos al mismo tiempo.

¿Cómo motivarse a uno mismo?

Además de seguir un entrenamiento mental contra la desmotivación, habla contigo mismo y haz una retroalimentación positiva, como por ejemplo recibir halagos por uno mismo siempre que te hayas motivado y cumplido uno de tus objetivos.

¿Qué hacer cuando no tienes ganas de ir a trabajar?

Busca el lado positivo de tu empleo e innova para hacer de él algo más divertido: puedes cambiar la rutina o hacer algo nuevo durante los descansos como probar una nueva cafetería. Evita actitudes negativas y racionaliza tus emociones.

Comentarios
Marta Estevez, experta médica en DKV Quiero Cuidarme
Autor/a: Marta Estévez

Psicóloga especializada en neuropsicología.

 

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